Del Testamento de Mancio al Poder de Porras
LOS "ARREPENTIDOS"
Fernando Bobbio
Rosas
Mancio Sierra
de Leguízamo fue uno de los más distinguidos criminales
que asaltaron y destruyeron el Tawantinsuyu; un índice de su
importancia es que, luego de la toma del Qosqo, en el reparto del
botín le correspondió el enorme Disco de Oro que re-presentaba
al Inti en el Kori-kancha, que perdió jugando esa misma noche
"a los dados" (ya buscaba deshacerse de algo que sentía
malhabido).
Así, Mancio ganó el Sol y lo perdió de inmediato;
pero, además, redactó un volumi-noso Informe sobre sus
acti-vidades y, al final de su vida, avergonzado y arrepentido, repudió
su pasado y lamentó amargamente la canallesca empresa de la
que fue desta-cado autor (ver recuadro).
Mancio no fue el único criminal arrepentido, pero los "historiadores"
prefieren igno-rar el tema; Rivagüero fue una excepción,
al admitir el valor del testamento de Mancio como "solemne confesión
de un mori-bundo donde no caben mentira ni amaño". Pero
este recono-cimiento es rechazado por sus colegas y discí-pulos
de los que el más notable fue Porras, quien lla-mó a
Mancio "viejo charlatán" y, cada vez que se refería
al testamento en cuestión, lo cali-fica (al documen-to) de
"balandrón de un fanfarrón".
Esta reacción descubre la au-téntica nacionali-dad (no
la oficial) de todos esos "peruanos" que no han roto el
cordón umbilical con su "Madre Patria" (o su P.M.),
y a los que cualquier testimonio que niegue o mengue en lo mínimo
el valor que ellos han atribuido a esa canallesca empresa como fue
la conquista, los electriza, histeriza y eriza.
La hispanidad de Porras es el sello de su obra y su pecado capital.
Es la clave de su papel en la República Criolla de la que fue
uno de los "más altos valores y el más digno de
sus repre-sentantes".
Por extraña coincidencia Porras, como Sierra, gana esa dignidad
al momento de la despedida. El 23 AGO 1960, por el "caso Cuba",
Porras asiste a la Reunión de Cancilleres de Costa Rica y pronuncia
un histórico discurso donde sostiene que, por tradición,
al Perú le corresponde armonizar y conciliar cual-quier diferencia
que surja entre países america-nos. Por ello, ante el conflicto
CUBA vs. EEUU (y com-pañía), propone una fórmula
de tolerancia que rechaza el fanatis-mo y en la que prevalece la razón.
Y contra-riando órdenes expresas reci-bidas y reite-radas a
cada momento (dada la importancia del asunto) por el Presidente Prado,
el Perú dio su voto singular a favor de Cuba, a la que se pretendía
agredir (aunque de todas maneras fue y está siendo agredida).
La reacción del Mayordomo residente en la Casa de Pizarro fue
fulminante: Ordenó el regreso inmediato de su ministro y le
pegó la más humillante reprimenda jamás escuchada
en el Palacio de los Virreyes (que después de Cáceres
y con la única excepción del Presidente Velasco, ya
sólo aloja administradores, mayordomos o sirvientes de menor
categoría). Porras dimite y se retira a su casa donde, victima
de una grave depresión, muere el 27 SET de ese mismo año.
Su discurso de San José de Costa Rica fue su testa-mento, y
así como Mancio se arrepiente y condena las atro-cidades que
perpetró. Porras repudia y rompe (más que sea momentáneamente)
la tradicional sumisión que es el sello de esta República
Criolla con la que tan íntimamente estuvo identificado y a
la que tan a gusto sirvió a lo largo de toda su vida como parla-mentario,
diplomático y ministro.
"...el
intento que me mueve a hacer esta relación es por el descargo
de mi conciencia y por hallarme culpado en ello; pues hemos corrompido
a gente de tanto gobierno como estos naturales, y tan quitados de
cometer delitos, ni excesos, así hombres como mujeres; y cuando
ellos vieron que nosotros poníamos puertas y llaves en nuestras
casas, entendieron que era de miedo que teníamos de ellos que
no nos matasen; pero no porque se creyese que era posible que ninguno
hurtase ni tomase a otros la hacienda; y así cuando vieron
que entre nosotros habían ladrones y hombres que incitaban
a pecar a sus mujeres e hijas, nos tuvieron en poco; y habiendo venido
este reino a tal rotura, en ofensa de Dios, entre los naturales por
el mal ejemplo que les hemos dado (...) y con eso suplico a mi Dios
me perdone mi culpa. Yo confieso que la tuve y tengo, por ver que
soy el postrero que muero de todos los descubridores y conquistadores,
y pues en eso entiendo que he descargado mi conciencia" (Testamento
de Mancio Sierra de Leguizamo).
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¡El más grande entre todos!
UN PEQUEÑO GIGANTE
Carlos Coronado
Bartolo (ATIPAQ)
"Los
animales domésticos que Dios dio a los indios del Perú,
fueron escasos pero hartamente aprovechados" (Blas Valera -
Cronista mestizo del s. XVI).
El
cuy, uno de los alimentos principales en la vida del antiguo poblador
andino, hoy es injustamente marginado a causa de taras extranjeras
que, en algunos casos, llegan a compararlo con la rata. "Tara"
que ha sido impregnada adrede en la mente del cholo urbano, descendiente
directo del runa "cuyero" constructor de Tiahuanaco, Kuélap
y Machu Picchu.
Nuestro cuy constituyó uno de los recursos alimenticios que
permitieron la Confederación Expansiva del Tahuantinsuyo,
cuyos ejércitos civilizadores necesariamente em-plearon su
carne en el respectivo racionamiento. Y en la Resistencia Alto andina
Cacerista, conjuntamente con la sagrada hoja de COCA, el "fiambre
breñero" fue la carne del cuy, como parte de la ración
básica.
Y esto tiene su sustento científico: La composición
química de la carne de cuy, según el análisis
del Depto. de Nutrición de la Universidad Nacional Agraria
"La Molina", es contundente y reúne más
proteínas que la Ración de Campaña del Marine
Norteamericano.
COMPARACIÓN
DE LA CARNE DE CUY CON OTRAS CARNES
Carne ad hoc para la altura: Harta proteína, y hasta ideal
para dietas: Bajísima en grasas.
Las primeras menciones del CUY, las encontramos en los "Comentarios
Reales de los Incas" del Inca Garcilazo, libro VIII, cap. XVI,
titulado: "Del Ganado Manso y las Recuas que del Había":
"Hay conejos caseros y campestres, diferentes los unos de los
otros en color
y sabor. Llámenles COY. También se diferencia de los
de España. De los caseros han traído a España,
pero se da poco por ellos. Mis hermanos indios, como gente pobre,
aprovechan de su carne que es sabrosa y nutritiva, los comen bien
y generalmente enpléanle en fiestas y como fiambre para el
camino, preparándolos en diferentes formas".
El cuy es originario de los Andes, esto es las serranías
de Tucumán, Chili, Alto y bajo Perú y Quito. Los vestigios
arqueológicos muestran cuyeras cons-truidas hace más
de 5,000 años, atestiguando la crianza de este ancestral
compañerito.
Las características de los restos de cuyeras ("pucuyos")
descubiertas en Casma por el sabio Julio C. Tello (1880-1947), permiten
considerar que esta crianza se llevó a cabo en estado de
semicautividad y cercano al fogón familiar incaico.
Estos "pucuyos" por lo común fueron pétreos,
que además de brindarle seguridad a un animalito por excelen-cia
tímido, le permitían por vía de sus rendijas
el desliza-miento de emisiones y desechos aprovecha-bles como excelente
abono de la huerta familiar.
Causa indignación etnona-cionalista, que nuestro cuy haya
sido prácticamente expectorado de la actual dieta peruana,
acomplejada hasta el tuétano y ávida de pollos inflados
y hasta papas importadas (ni siquiera el ají se compra aquí)
de los Kentucki's.
La revolución cultural también incluye el paladar,
y el Pachacuti que se avecina incluye a nuestra ancestral camaradita.
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¡Gringos de m...! Los reservistas los echarán del Perú
a patadas
ALTURAS DEL QOSQO: CARTA INDIGNANTE
Reservista Puka
Rumi
Hay
veces que la vida no deja de sorprendernos..." Parece que a pesar
de los tiempos seguimos bregando en el fango de la Colonia y cuando
observo a esos seres en su inmunda vida sosteniendo con su dolor la
vida de individuos mezquinos y despiadados (nakaq), siento que la
metafora de este tiempo en que algo de la humanidad del hombre se
está eclipsando. Pero son muchos los que en medio de la tempestad
continúan luchando, ofreciendo su tiempo y hasta su propia
vida por el otro. Por eso, donde abunda el peligro crece lo que salva.
Sí, la carta que recibi, la hago público a través
de este importante medio de comunicación masiva, "Ollanta",
cuyos lectores son muy interesados sobre nuestra problemática.
Digo así debido a que es de interés nacional de como
aún mantenemos ese síndrome de ser dominados por elementos
extranjeros que con sutilezas finas nos envuelven en un torbellino
de explotación. Aquí la carta de un amigo. (Carlos Abanto
- Cineasta patriota).
Lima,14
ENE 2003
Sr. Carlos Abanto Leyva
Deseo informar mi experiencia de trabajo como realizador independiente
en el documental "Ay trago no me hagas llorar más",
grabado en NOV 1999 en la comunidad de Omacha (Paruro-Cusco).
Me conocí con la antropóloga Elif Karakartal en un café
del Cusco, en dicha cita me contó que quería filmar
imágenes en la comunidad de Omacha, pero que tenía bajo
presupuesto,
para lo cual yo me comprometía a registrar imágenes
en dicha comunidad durante 5 días las cuales serían
parte de un documental que ella realizaba en la ciudad de Cusco. Mis
condiciones fueron: Pagar 300 dólares por el alquiler de la
cámara y que se me diera algunas imágenes para mi archivo
personal, aparte de la copia del video final que como autor de las
imágenes, me correspondía.
Hubo un acuerdo de buena fe en el cual yo, Miguel Piedra como camarógrafo
y Mozis Villagarciá como asistente de cámara nos involucrá-bamos.
Ibamos a contar la historia del grave problema de alcoholismo que
atraviesa la población de Omacha, tema del documental, y la
"situación económica" de Elif nos empujó
a ayudarla prestando nuestros servicios gratis con una antropóloga
francesa. A los 2 días enrumbamos a Paruro, con destino a Omacha.
Eramos 4 desconocidos trabajando en un proyecto audiovisual sin un
guión, ni siquiera un texto que nos guiara hacia una lectura
visual del proyecto.
Nos transportamos en una camioneta de la ONG extranjera Guamán
Poma que nos dejo en Omacha (4000 msnm) y volvería por nosotros
después de 5 días.
El paisaje era maravilloso, lo 1ro que hice fue comprarme un sombrero.
Lo 2do fue darme cuenta al llegar a Omacha, que las promesas de hospedaje
y alimentación no se cumplían, que las descordinaciones
de producción presagiaban un fracaso en la interrelación
entre nosotros y la gente del lugar; era la 2da vez que Elif pisaba
Omacha y llegaba con todo un equipo de grabación (cámaras
trípode, pantallas, etc) a tocar un tema tan íntimo
para la comunidad y sin haberles avisado.
En 3er lugar lo que hice fue tomar distancia al conocer los apetitos
sensacionalistas y que la antropóloga buscaba en los pobladores
con problemas de alcoholismo.Yo, en mi condición de realizador
independiente, tengo muchísimo respeto por la pobreza y la
miseria en que viven estos, nuestros pueblos olvidados, y por lo tanto
gran responsabilidad por las imágenes que al final van a llevar
mi nombre , entonces tuve que poner un límite y decidí
filmar a los pobladores con la dignidad a la que todo ser humano tiene
derecho al ser retratado. Los filmé trabajando, bailando, cantando,
haciendo música, mientras que la extranjera sólo esperaba
el momento en que estuvieran borrachos para decirme que debería
"disparar la cámara", y se frustraba continuamente
por que yo le hacía poco caso. La relación se volvió
muy tensa, tanto dentro del equipo como entre nosotros y la comunidad,
porque práctica-mente éramos ya, desde hacía
4 días, verdaderos intrusos. El no jugar al "voyeur",
el no jugar al periodista sensacionalista, al mirón morboso
con una cámara al hombro fue lo que terminó por romper
una relación entre 2 personas (ella y yo) con valores distintos.
En 4o lugar solo me queda agradecer a los cerros de Omacha que me
inspiraron para ponerme de filtro entre una gringa que hurgaba en
la miseria humana y un pueblo tan necesitado de una imagen positiva
y esperanzadora.
Esperaba tener noticias de este trabajo pero no fue así, ahora
me entero del impacto que ha tenido el documental "Ay trago no
me hagas llorar más"durante estos 4 años, en los
que destaca la presencia de Elif Karakartal como una "laureada
directora cinematográfica". Indignado por lo sucedido
te escribo estas líneas con ajo.
Miguel Piedra Collantes - Realizador independiente - DNI: 09364150
N. de R.- Esto es racismo, per-manente y "legal" desde 1532,
contra nuestra Nación. Se quie-re "concluir" por
medio de un "gringovideo pendejo", la imagen de nuestro
pueblo, como un ganado humanoide derrotado, excluido, sin dignidad,
alcoholizado y "por consiguiente" vergonzante. Lo mejor
que le po-dría suceder pues, sería extinguirse en cámara
lenta, como una sub-humanidad "sobrante", que debe seguirle
al paso al Cromagnon. Sólo el etnonacionalismo puede revertir
la cosa, en que si los extranjeros per-sisten en sus canalladas, puede
"añorar" la vía tupaka-tarista:"Manda
el soberano Inka que pasen a cuchillo a todos los corregidores, sus
ministros, caciques, cobrado-res y demás dependientes como
asimismo a todos los chapetones y criollos de ambos sexos, y toda
persona que sea o parezca ser española, o que a lo menos esté
vestida a imitación de tales extranjeros" (Proclama de
Túpak Katari - 19 MAR 1781 - Tiquina, Alto Perú).
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